Se venden kilómetros con causa

 

Este próximo 28 de agosto se realizará la edición XXXIV del Maratón Internacional de la Ciudad de México, que desde hace 3 años retoma la ruta olímpica que finaliza el recorrido de 42 kilómetros 195 metros en el Estadio Olímpico de Ciudad Universitaria tras iniciar en el Palacio de Bellas Artes en Av. Juárez y recorrer Insurgentes Norte, Paseo de la Reforma, Polanco, Chapultepec (Castillo), Condesa y todo Avenida Insurgentes desde Viaducto hasta CU.

Gracias a la revista Runner’s World (donde cada mes pueden leerme en la columna A Tu Ritmo) y a Adidas México, en unas semanas estaré participando en dicha carrera.

 

 
 

No los aburriré aquí con una explicación del significado y reto personal de este particular maratón. Tampoco entraré en las profundas clavadeces e introspecciones sobre la experiencia de preparar y enfrentar un maratón, la satisfacción privada y los muchos beneficios subjetivos e íntimos (psicológico-mentales y físicos) de entrenar por varios meses para tratar de terminar un maratón en determinado tiempo.

Lo que sí haré es invitarlos a participar en cómo llevar lo positivo de esta experiencia a otras personas más allá de quienes corremos por horas a cambio de una medalla, un plátano, una bebida de proteína y un indescriptible y muy personal sentimiento de satisfacción.

 

AMANC

 

Aquellos que lo desean pueden aprovechar el egocéntrico reto de correr un maratón y convertirlo en una dinámica que pueda beneficiar a alguien más que al corredor. Este año me vuelvo a sumar a esa lista de personas que deciden convertirse en Corredores con Causa.

AQUÍ la lista completa de fundaciones con las que el Maratón de la Ciudad de México trabaja en esta edición.

Por mi parte, este año correré a favor de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (AMANC), #YoCorroPorAMANC, lo que significa que necesito de buenos samaritanos que quieran comprar o patrocinar kilómetros (o metros) de mi maratón en beneficio de esta A. C.

 

SelloDorado

 

Además de ayudar a los niños y niñas que enfrentan una enfermedad como el cáncer, y a sus familias, estos kilómetros vendidos se convierten en una (siempre necesaria) motivación para dar cuenta de esa larga ruta con un mejor ánimo y mentalidad.

Si les interesa, esto es lo que deben de hacer.

  • Cada patrocinador debe depositar $100.00 (cien pesos) por cada 100 metros que desee ‘comprar’, a la cuenta de Bancomer 0193230392 / CLABE 012180001932303928 a nombre de Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer, IAP.
  • Al hacer el pago o transferencia, indicar en el campo Referencia del depósito o transacción mi número de corredor (#495) para ubicar el donativo.
  • Enviarme (por correo o por redes sociales) una foto del comprobante del depósito o el comprobante del depósito en caso de hacer el donativo por internet.

Yo haré llegar a la AMANC la relación de kilómetros y patrocinadores para que estos sean publicados en su sitio yocorroporamanc.org.

Pueden saber más de ellos vía FACEBOOK y TWITTER.

De antemano, un sincero agradecimiento a quienes se sumen a esta iniciativa… y quienes no puedan entrarle a la compra de kilómetros, espero verlos el domingo 28 de agosto en algún punto de la ruta echando porras o apoyando a los miles de corredores que salimos, porque esa presencia es uno de los factores que más ayuda a que lleguemos a la meta. Uf. Vaya que sí.

 

Cuenta regresiva

 

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